La música clásica siempre se define como un estilo ya pasado de moda entre los jóvenes por utilizar instrumentos que ya no son de uso acostumbrado y por presentarse como algo demasiado "alto" como para entenderlo.
Pues no es así. Aunque debemos reconocer que actualmente entre la juventud ha perdido su esplendor, siempre podremos recurrir a ella cuando necesitemos el abrazo de algo que nos comprenda y tranquilice, o cuando queramos apartarnos del mundo de conflictos en el cual vivimos.
Personalmente, la música clásica forma parte de mis cd's por ser tan completa, ya que con ella puedo expresar mis dolores y sufrimientos, tanto como mis dichas y alegrías. Porque es así, es un sinfín de opciones emotivas.
Creo que ese sería el único término correcto: "Sinfín de emociones".
Además, si nos dejamos llevar, si nos dejamos atrapar por sus muchas notas, podremos permitirnos viajar a donde nunca pudimos...conociéndonos mucho más aún.
Es un verdadero collage de entusiasmo e imaginación...sólo que no es comprendida por todos, porque ni siquiera son capaces de brindarse una oportunidad para apreciarla aunque sea una vez para así, a partir de ese sencillo punto, poder decir -No me gusta-.
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